Un proyecto Modelmon en Palmanyola cuyo eje principal fue la combinación de piezas de distinta procedencia. Nuestra clienta deseaba mantener aquellas que procedían de una casa anterior, pero incorporando nuevos elementos.
El buen gusto de la propietaria y nuestra experiencia anterior con ella en otra vivienda previa hizo que el proyecto fluyese.
Para aportar un toque más hogareño priorizamos las piezas mallorquinas más artesanales, dotando de personalidad al espacio.
El salón-comedor está presidido por lámparas de techo de vidrio soplado y una mesa en madera de roble decapada, un material muy presente -sin decapar- en el resto del salón.
En los dormitorios dominan los colores sobrios en muebles y ropa de cama, transmitiendo equilibrio y elegancia.